Se podría decir que si visitamos la Basílica de San Clemente de Roma estaremos visitando en realidad tres templos de diferentes épocas.
Y es que esta bonita basílica situada muy cerca del Coliseo de Roma consta de 3 niveles superpuestos, cada uno de ellos perteneciente a una época distinta de la historia. Pasar de un nivel a otro te llevará en un viaje en el tiempo desde el siglo XII hasta el siglo I en esta basílica dedicada al Papa Clemente I.
Existe un Tour por las basílicas de Roma, que te recomendamos realizar pues en muy poco tiempo podrás conocerlas todas de manos de un guía experto.
El nivel superior. La Basílica del siglo XII
En la calle que une el Coliseo de Roma con San Juan de Letrán nos encontramos con esta basílica cuyo exterior no nos dice mucho pero que su interior esconde una gran parte de la historia de Roma.
La entrada se realiza a través de un bonito atrio medieval, que es además el mejor conservado de Roma.

A la izquierda encontramos con la Capilla de Santa Catalina, una de las primeras obras del Renacimiento en Roma y donde encontramos unos interesantes Frescos de Masolino da Panicale.
En el ábside encontramos el otro punto de interés gracias a su mosaico. En este espectacular mosaico de gran belleza podemos ver la vida que procede de la cruz.
La visita a este nivel es gratuita. Para visitar el resto de niveles hay que comprar una entrada.
El segundo nivel. La Basílica del siglo IV
Tras disfrutar de la pequeña basílica y su rica decoración del nivel superior podemos emprender camino hacia varios siglos atrás y a través de la sacristía acceder al piso inferior.
Esta basílica del siglo IV era más ancha que la actual y en ella se observan los refuerzos que se construyeron para poder soportar el peso de la parte superior.
En su centro podemos ver diferentes columnas pero estas son del siglo XIX colocadas tras la retirada de la tierra que cubría las naves durante las excavaciones llevadas a cabo en esa época.
Entre los puntos de interés de la parte inferior de la Basílica de San Clemente debemos destacar los diferentes frescos medievales que relatan la vida de Clemente I.
El Mitreo, viaje al siglo I
Todavía podemos bajar más en la Basílica de San Clemente y de esta manera encontramos un lugar con casi 2000 años de historia.
Hay que decir que es un lugar con mucha humedad y que suele hacer frío por lo que recomendamos ir abrigados.
En esta zona encontramos un pequeño templo dedicado a Mitra que era usado para rituales de iniciación y además sirvió como lugar secreto de reunión de los primeros cristianos.
Como pedes observar, cada nivel es diferente por lo que creerás haber visitado tres basílicas.
Puedes encontrar más información en la página oficial de la Basílica de San Clemente.