No te puedes ir de Granada sin haber visitado el Corral del Carbón, la única alhondiga andalusí que se conserva en España.
Fue construido en el siglo XIV en época nazarí y en sus inicios servía como almacén de mercancías y residencia de los mercaderes que acudían a la ciudad.
Con la conquista de Granada por parte de los Reyes Católicos adquirió otros usos como por ejemplo, corral de comedias. Actualmente es la sede del Legado Andalusí y Oficina de Turismo de la Junta de Andalucía.
Qué ver en el Corral del Carbón
Lo primero que observamos al visitar el Corral del Carbón es el vestíbulo de entrada que se encuentra tras un gran arco de herradura y que da paso a un patio interior rodeado por diversas galerías y salas.
En el centro del patio encontramos una pila cuadrada de piedra con diversos caños.
Lo que sobretodo destaca es la gran monumentalidad de su puerta de entrada, muy ornamental y que te hace pensar en un interior muy rico en decoración, con la sobriedad y simplicidad de su interior, que parece no tener nada que ver con la puerta.
También hay que destacar que su interior está muy remodelado para poder albergar las oficinas que hay hoy en día. Aunque ya no tiene el uso inicial para el que fue construido, hoy en día toma gran protagonismo, sobretodo en verano, con actuaciones musicales y representaciones teatrales, recuperando uno de los usos que ha tenido a lo largo de su historia.
La mayoría de estas representaciones son de flamenco, siendo uno de los mejores sitios para disfrutarlo de Granada.