Situada junto a la Ringstrasse de Viena encontramos la majestuosa Iglesia Votiva, un templo neogótico que no debes olvidar en tu visita a Viena.
Fue mandada construir por el hermano de Francisco José I tras el intento de asesinato sufrido por este en 1853 cuando un hombre le atacó con un estilete. Gracias a una colecta se consiguieron los fondos con el que se construyó esta iglesia en el mismo lugar del atentado.
Las obras duraron 20 años y fue inaugurado en 1879, justo el día de las bodas de plata del emperador y su mujer Sissi.
Qué ver en la Iglesia Votiva
Del exterior de la Iglesia Votiva lo más destacable son sus 2 imponentes torres de nada menos que 99 metros de altura y que se ven desde lejos.
Tienen forma de aguja y son un símbolo de esta iglesia católica que la hacen dirigirse hacia el cielo.
Tras cruzar su puerta principal, que se encuentra entre las 2 inmensas torres, llegamos a su interior, que también es espectacular.
En su interior lo que debemos destacar sus altos techos y sus vidrieras, elementos que otorgan una gran luminosidad a esta iglesia de Viena.
No hay que perderse el altar dedicado a la Virgen de Gudalupe, erigido en honor a Maximiliano de Habsburgo, el hermano de Francisco José, debido a su proclamación como emperador de México.
También hay que admirar el sarcófago de Nikla Salm, comandante que estaba al frente de las tropas austriacas durante el asedio turco de 1529, y la curiosa Vela Bárbara, situada tras el altar y con unas dimensiones tan grandes (4 metros de alto y 3 de ancho) que se dice que podría durar encendida 100 años.
Puedes encontrar más información en la página oficial de la Iglesia Votiva.