En el Barrio de Malá Strana de Praga tenemos el Monte Petrin, una colina de 138 metros de altura desde el que se tienen unas vistas maravillosa de la ciudad siendo uno de los lugares favoritos de los praguenses para relajarse y pasear.
Además, en el Monte Petrin hay una torre de 60 metros de altura, de hierro y que nos recuerda la Torre Eiffel de París, pero en miniatura.
Si quieres las mejores fotografías de Praga, no dejes de visitar este lugar.
La Torre de Petrin
La Torre de Petrin en sí tiene 60 metros de altura.
Pero teniendo en cuenta los 138 metros sobre la ciudad que se eleva la colina, las vistas que se tienen desde la torre bien podrían parecerse a las que se tienen desde el segundo piso de la Torre Eiffel.
Para subir a la torre se pueden usar las escaleras y también los ascensores y es una experiencia muy recomendable.
Igual que lo es la manera de llegar hasta ella caminando por los jardines del Monte Petrin o subiendo hasta allí en el Funicular de Petrin.
Esta torre se construyó 2 años después de la Eiffel y es un orgullo para los checos. Tanto que no hay que decir nunca delante de ellos que es una Torre Eiffel en miniatura pues para ellos es simplemente su Torre.
En el Monte Petrin tenemos también un lugar muy curioso y que, al igual que la Torre Petrin, fue construido para la Exposición Universal de Praga de 1891. Se trata del Laberinto de los Espejos, un lugar donde los niños disfrutarán con los espejos convexos de su interior por lo que si viajas con ellos es muy recomendable.
Puedes encontrar más información en la página oficial de la Torre de Petrin.