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Visitar el Palacio Schönbrunn de Viena, la residencia de verano

Situado lejos del centro de Viena encontramos el Palacio Schönbrunn, la antigua residencia de verano de la familia imperial y uno de los lugares más visitados de Austria.

Este imponente palacio es una de la construcciones barrocas más importantes de Europa y junto con sus jardines es Patrimonio de la Humanidad.

Visitar al Palacio Schönbrunn es una actividad imprescindible en Viena aunque tengas que desplazarte a las afueras.

Qué ver en el Palacio Schönbrunn de Viena

Viena - Palacio SchonbrunnSi decides visitar el Palacio Schönbrunn de Viena encontrarás suficientes atracciones como para pasar aquí gran parte del día.

En el interior del palacio se pueden encontrar diferentes estancias con una decoración y mobiliario únicos que te llevarán hasta la época imperial y descubrirás cómo era la vida en palacio durante esos años.

La visita puedes realizarla con una audioguía en diferentes idiomas, entre ellos el español.

En la visita podrás recorrer algunas de sus estancias que se encuentran tras subir las famosas escaleras azules que te llevan al piso superior.

Allí encontrarás los apartamentos del emperador Francisco José y Sissi, con decoración del siglo XIX, y también los apartamentos de María Teresa.

Cabe destacar el contraste entre la suntuosidad de los salones oficiales y la sencillez de las estancias de Sissi.

También se visitan estancias oficiales en las que los emperadores realizaban su trabajo. Y no te pierdas la Gran Galería, uno de los lugares más espectaculares del palacio.

Visitar los jardines del Palacio de Schönbrunn

Viena - Palacio Schonbrunn - La GlorietaLos jardines del Palacio de Schönbrunn son también de obligada visita.

Su extensión no es tan grande como los del Palacio de Versalles de París, pero gracias a ellos este palacio es conocido también con el sobrenombre del Versalles Vienés.

En estos jardines hay muchos lugares interesantes que visitar pero sin lugar a dudas el más importante es La Glorieta, situado justo enfrente de la fachada del palacio que da al jardín y desde donde se tienen las mejores vistas del mismo.

Y desde allí, por encima de la fachada del palacio se tienen unas vistas geniales de la ciudad de Viena. También hay una cafetería con una terraza para disfrutar.

En el resto de los jardines encontraremos fuentes, laberintos y paseos que harán las delicias de cualquier que visite el Palacio de Schönbrunn.

En su interior está también el Museo de Carruajes, que recomendamos visitar, y un Teatro de Marionetas muy curioso que divierte a niños y adultos.

Breve historia del Palacio de Schönbrunn

Viena - Palacio Schonbrunn - Fuente NeptunoLos orígenes del Palacio de Schönbrunn datan de finales del siglo XVII cuando el emperador Leopoldo I encarga construir un palacio para su hijo José en el mismo lugar donde existía un pequeño palacio de caza desde 1559 pero que fue posteriormente destruido.

Sin embargo este palacio cayó en el olvido hasta que María Teresa lo quiso convertir en el palacio veraniego de los Habsburgo y ordenó su ampliación, reforma y que se decorara en estilo rococó.

En 1805, Napoleón ocupó Viena y estableció su cuartel general en el Palacio de Schönbrunn. Por eso, pasó bastante tiempo en este lugar y hoy podemos visitar también el que fuera su dormitorio.

El carácter de residencia veraniega de los Habsburgo se mantuvo hasta el final de la monarquía en 1918 tras la abdicación de Carlos I en el Salón Chino Azul de este palacio.

Si quieres obtener más información puedes entrar en la página oficial del Palacio de Schönbrunn.