Visitar cárceles puede parecer una experiencia tenebrosa y morbosa pero lo cierto es que muchos de los monumentos más famosos del mundo, como la Torre de Londres o la Conciergerie de París han sido cárceles. La diferencia es que son bastante más antiguas que esta de Dublín y no tienes la sensación de estar en alguna.
Kilmainham Gaol es un lugar muy especial en la historia del país ya que en esta cárcel estuvieron presos muchos los principales protagonistas de la lucha por la independencia de Irlanda.
Hoy en día, ya no es una cárcel, está reconvertida en museo y se puede visitar.
Qué ver en Kilmainham Gaol
La cárcel se inauguró en 1796 y por ella han pasado numerosos líderes independentistas hasta que se cerró en 1924 quedando abandonada hasta 1970 cuando fue remodelada para poder visitarse y conocer cómo era la vida en prisión.
La visita guiada que se puede realizar en la cárcel comienza en la capilla, el lugar más célebre de la misma por ser donde el famoso líder irlandés Joseph Plunkett se casó días antes de ser fusilado por haber participado en el histórico Alzamiento de Pascua de 1916.

Estos reclusos no eran separados por sexo o edad e incluso había hasta niños que habían participado en robos. Tal era la situación de pobreza que había en el país a mediados del siglo XIX que los delitos por robo se multiplicaron y con ellos el número de reclusos que vivían hacinados.
Tras la visita a las celdas, se accede al patio donde se llevaban a cabo las ejecuciones de los presos. Es el lugar más tenebroso y donde se te pone la piel de gallina imaginando lo que ocurría allí. La última estancia es el museo de la cárcel donde se exponen objetos que pertenecieron a los presos.
Puedes encontrar más información en la página oficial de Kilmainham Gaol.